20/10/2025 - 16:10 - Industria
Autor: Florencia Lippo
Argentina siempre fue un país más guiado por las expectativas que por las realidades. Durante gran parte del año, la esperanza de cambio funcionó como refugio frente a un presente difícil. Pero cuando esa expectativa se debilita, el comportamiento cambia: el consumo se repliega.
Según el nuevo informe de la consultora Moiguer sobre el mood del consumidor, ahora el panorama muestra que caen las expectativas a futuro, y se setea bajo una mayor cautela.
Los hogares adoptan una actitud de resguardo frente a la incertidumbre:
-El ahorro crece en todos los niveles socioeconómicos (al menos +4pp en cada nivel respecto al trimestre anterior).
-El endeudamiento aumentó 7pp desde el I trimestre, con mayor peso en C3 y D. Las principales razones: gastos corrientes.
-La restricción predomina: el 35% redujo gastos cotidianos y evitó consumos suntuarios (52% en nivel D y 40% en AMBA).
La búsqueda por la conveniencia y los precios más baratos se traslada incluso a las compras en el exterior: aunque el 16% declara haber comprado afuera (8pp más que en enero), la motivación principal ya no es la expansión o el deseo, sino la conveniencia racional del gasto.
“Comprar afuera ya no es tan barato, aproveché mientras convenía.”(Ciudadano C3, CABA). El consumo deja de ser un refugio emocional para volverse una decisión calculada.
Hasta acá, la esperanza de futuro sostuvo el mal presente. Hoy la ecuación cambió: con la esperanza puesta en jaque, se prioriza el ahorro y se restringe el consumo.
El desafío para las marcas: cómo ofrecer valor real en un contexto donde cada decisión se mide con cautela. Simplificar la propuesta, reducir fricciones y dar certezas será clave para conectar con consumidores que, más que nunca, buscan justificar cada peso que gastan.