13/01/2021 - 11:01 - Canales
Autor: Florencia Lippo
El 2020 fue un año atípico para la economía global. El consumo, que ya venía transformándose en los últimos años, se reconvirtió durante los aislamientos obligatorios adoptados en casi todo el mundo, y lo mismo sucedió en la Argentina. Los consumidores se acercaron al canal digital y optaron por espacios de venta donde pudieran hacer todas sus compras en un solo lugar para evitar las salidas -y así prevenir el contagio.
Ante ese comportamiento el e-commerce se alzó como el gran ganador del 2020, y los supermercados fueron el canal dentro del mundo físico con mejores resultados, sobre todo con un incremento en la demanda de las marcas propias y un interés por las acciones promocionales.
Según Nielsen, el año pasado cerró con una caída del -6,8% en el consumo en general, incluidos todos los canales. Sin embargo, al poner la lupa, vemos que el e-commerce creció 199,5% y se convirtió en "la nueva conveniencia", como lo denomina la consultora.
En segundo lugar, los supermercados registraron una suba del 3,8% en las ventas; y los mayoristas una variación casi flat del 0,5%. Luego, el resto de los formatos mostró números en rojo. Los autoservicios perdieron -3,8%; las perfumerías -5,2% -impactadas por los cierres-; el canal tradicional tuvo un -6,3%; las farmacias -8,3% -con un switcheo de categorías clave a los supermercados- y los kioscos, el segmento más golpeado, terminaron el 2020 con una merma del -18,2%, ante una menor circulación de gente en la calle.